Me encanta realizar rituales en cada estación del año y el ritual de verano me gusta especialmente.
En verano tenemos muchas más horas de luz y sentimos más intensamente el calor del sol. Los árboles nos ofrecen jugosas frutas y toda la naturaleza parece estar rebosante de alegría. Es un buen momento para conectar con nosotros/as mismas, ver qué es aquello que queremos que madure o qué fruto queremos obtener y cuáles son los obstáculos que debemos vencer.
Te propongo este ritual para explorarlo. Necesitarás papel y lápices o ceras de colorear.
Pasos a seguir para identificar lo que quieres y los obstáculos a superar
- Busca un lugar donde dar un pequeño paseo para conectar con la naturaleza.
- Siéntate, cierra los ojos, observa lo que sucede dentro y fuera de ti. Permítete estar ahí unos minutos y luego trae a tu mente aquello que te gustaría dejar brillar. Visualízate habiéndolo ya conseguido y observa todas tus sensaciones. Piensa después en los obstáculos, los miedos, que te están impidiendo alcanzarlo.
- Abre tus ojos, escribe en el centro de un folio tu propósito y deja que tu mano te guíe para decorar el folio con otras palabras, formas, garabatos. Mira tu dibujo y observa cómo te sientes. Ahora piensa en los obstáculos que te impiden conseguir ese propósito. Puedes escribirlos alrededor de éste o en papelitos a parte. Después, podrás quemarlos en algún lugar seguro y esparcir las cenizas en algún lugar especial.
- Por último, piensa qué mensajes te llevas con este ejercicio y analiza como llevar lo que has aprendido a tu vida para conseguir aquello que anhelas.
Feliz verano!
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